Hay un tipo de tatuajes temporales pequeños, de hecho, muy pequeños, tanto que podemos llamarlos micro, que tratan de imitar la naturaleza de los pelos de las cejas y que se realizan pelo a pelo para rellenar aquella parte de la ceja que haya perdido densidad por determinadas causas. Estos tatuajes semipermanentes se llaman microblading de cejas y es un tratamiento de belleza muy de moda en la actualidad, especialmente desde que se llevan las cejas gruesas y marcadas y el maquillaje de cejas se ha convertido en toda una tendencia. Ahora os vamos a contar qué es el microblading de cejas, en qué se diferencia de la micropigmentación de cejas, en qué consiste el proceso que se realiza para llevarlos a cabo y algunos ejemplos.
¿Qué es?
Como hemos mencionado, el microblading es una técnica de maquillaje semipermanente donde se «tatúa» cada pelo de la ceja en la epidermis, por eso es temporal, para modificar su forma, su densidad y su color. Normalmente, con la edad se pierde pelo de las cejas, así como por causa de tratamientos como la quimioterapia y muchas personas se realizan el microblading para mejorar el aspecto de sus cejas y que resulten más atractivas y a la moda. Hay otro tipo de personas que, simplemente, desean camuflar cicatrices, corregir asimetrías o modificar la forma y la densidad de sus cejas para potenciarlas y que estén en consonancia con las tendencias actuales de maquillaje y según el canon de belleza actual, donde unas cejas definidas e imponentes se consideran atractivas.
¿Qué diferencia hay entre el microblading y la micropigmentación de cejas?
Quizás hayáis visto los dos términos y podáis confundirlos. La principal diferencia es que en la micropigmentación de cejas se implanta la tinta del dibujo de cada pelo en la dermis, por lo tanto, es como un tatuaje convencional y dura más, pero también se produce una mayor hinchazón y tarda más en cicatrizar. En el microblading, la tinta se implanta en la epidermis, la parte superior, por eso dura entre uno o dos años y no se tiene que producir este proceso de cicatrización, así que es un proceso menos traumático que la micropigmentación, es más económico y es reversible.
¿Cómo se realiza el microblading de cejas?
Cuando acudáis a una clínica de estética o a un centro especializado en microblading, tenéis que aseguraros de que el técnico que os lo haga sea un especialista con experiencia. En Madrid, por ejemplo, podéis contar con Katherine Valencia, del centro MicroStetic, que es una gran profesional y que, además, es formadora. Así pues, primero tendrá que realizar el dibujo de las cejas, teniendo en cuenta la proporción con el rostro, tanto su tamaño como su forma, así como la de los ojos, mediante la proporción áurea. Después, iniciará el proceso de dibujar pelo a pelo con una pluma provista de agujas para el microblading, que tienen que ser muy específicas. Esa aguja se mojará en una tinta o un pigmento especial para microblading, que tendrá que ser idéntica a la del pelo de vuestras cejas para que el resultado sea natural y apenas se note el retoque. Cuando la aguja esté mojada en el pigmento, se realizarán pequeños microcortes en la piel para introducir el pigmento en la piel, pero no os preocupéis, tan solo resulta molesto y es perfectamente soportable. Se seguirá el procedimiento de «tatuar» pelo a pelo hasta que la forma de la ceja y su relleno estén finalizados, normalmente tarda unos 45 minutos. En ocasiones será necesario realizar algún retoque.
El antes y el después del microblading de cejas
Ahora que ya sabéis qué es el microblading y cómo es el proceso que el técnico lleva a cabo, os queremos mostrar algunos ejemplos del antes y del después realizados en el centro MicroStetic de Madrid porque son procedimientos realmente bien hechos y en donde el resultado es natural, pero significativo.
Esperamos que os haya quedado claro este procedimiento de estética y que, si lo necesitáis, podáis recurrir a él para veros más guapos y guapas y sentiros más seguros con vosotros mismos.