Piensa que un tatuaje, al introducirse una aguja debajo de la piel e inyectar tinta, es una herida, en realidad, por lo tanto, es vulnerable a infecciones y hay que tener mucho cuidado para que cicatrice de forma correcta y, tanto la salud de tu organismo, como el aspecto del tatuaje, sea el correcto. Es muy, pero que muy importante, cuidar tu piel durante el proceso de curación de un tatuaje, siguiendo todas las directrices que el tatuador te dé. Te vamos te la vamos a detallar a continuación las consideraciones a tener en cuenta y según la fase post-tatuaje en la que estés, es decir, en las fases de curación de un tatuaje.
DÍA 1
El cuidado del tatuaje empieza desde el momento en que el tatuador finaliza su obra. Te pondrá un ungüento y lo vendará. Después de unas horas, podrás quitártelo y verás que el tatuaje supura un líquido, que es una mezcla entre sangre, plasma y tinta. Tendrás que lavártelo con agua tibia y jabón neutro, sin perfume. Después, aplicarás el mismo ungüento que haya utilizado el tatuador, seguramente una crema antiflamatoria, antiséptica y antibacteriana, como barmicil para el cuidado de la piel, que es buena para este fin porque ayuda a la cicatrización.
DÍAS 2-3
No te asustes si ves que tu tatuaje tiene una apariencia algo más opaca, es normal y seguramente empiece a formarse una costra, como la de las heridas. Tienes que seguir lavando el tatuaje como el día anterior y aplicarte una crema hidratante que no tenga perfume ni alcohol.
DÍAS 4-6
En esta siguiente fase vas a ver cómo en enrojecimiento del tatuaje empieza a desaparecer, aunque la ligera costra encima del tatuaje será todavía visible. Es importante que no te rasques la costra y que dejes que se levante y se caiga ella sola, ya que, si no, podrías dejar cicatrices o marcas y que el tatuaje no se vea bien. Por supuesto, tienes que seguir lavándote el tatuaje igual que los días anteriores. Lo mismo con la crema hidratante.
DÍAS 6-14
Ya pasada una semana desde la realización del tatuaje verás que la costra está endurecida y se empezará a desprender y a caer ella sola. Es posible que en esta fase sientas comezón y picor en la piel. No te rasques, aplica una crema humectante para aliviarlo. Si ves que todavía el tatuaje está rojo o hinchado, es posible que se haya infectado, así que acude a un dermatólogo.
DÍAS 15-30
¡Ya estás en la última etapa de curación de tu tatuaje! Las costras y las escamas de la piel ya habrán desaparecido, aunque quizás aún veas esa zona de piel un poco más seca y opaca, por eso es importante seguir hidratándola hasta equipararla con el resto de la piel de alrededor. En estas semanas la capa externa de la piel ya está sanada, pero las internas no. Éstas tardarán tres o cuatro meses en sanar, entonces será cuando el tatuaje realmente se verá con brillo y con los colores originales ideados por el artista tatuador.
Esperamos que este artículo te sirva para tener claro el proceso de curación de un tatuaje y los productos que debes utilizar. Aun así, cada piel y cada tatuaje son distintos, por lo tanto, tienes que estar muy atento a lo que te recomiende el tatuador y el dermatólogo, ya que lo que te contamos es un proceso estándar y tú quizás necesites un tratamiento especial con productos determinados.